Paseando ( Libre )

Era sabado y, para mi sorpresa, me había levantado bastante temprano. Salí de casa sin saber muy bien a donde ir, pero pronto se me vino a la cabeza que ir a dar un paseo hasta la valla sería buena idea. Me heché a andar y, cuando me dí cuenta, estabá ya allí. por mi cabeza rondaban un montón de cosas: El trabajo, mis pesados padres etc. pero de entre todas, había una que no se me iba de la cabeza: Kira, la chica que había conocido el día anterior. Me senté con la espalda apollada en la valla.

Era sábado y estaba muerta de sueño. Pero, por alguna razón, a mi padre le había parecido que sería una buena idea despertarme temprano para "aprovechar el día". No había podido volver a dormirme, así que salí a dar un pequeño paseo por los alrededores.
Iba tan distraída que ni siquiera miré hacia donde estaba caminando, y casi me choco contra un árbol. Pero me di cuenta a tiempo, y me paré un momento antes de mirar hacia arriba y empezar a trepar hacia la copa del árbol. Lo mismo podía tumbarme un rato entre las ramas.

Off: estuve ausente estos días... :S es que entrenar y jugar a la play no me queda tiempo.

On:

Vi acercarse una silueta, venía hacia aqui. Parecía absorta en sus pensamientos, debían ser importantes. Al cabo de 1 minuto me dí cuenta de quien era: Kira Wonrey, la chica que vivía dos casas más allá de mi, le encantaba trepar y era guapisima. Seguía absorta en sus pensamientos cuando me acerque a ella por la espalda y le dí un susto- ¡ Buuu !- grité esperando poder reirme de su cara de miedo.

Off: No pasa nada ^^

On:

Escuché como alguien decía "¡Buuu!" a mis espaldas. No me lo esperaba y me sobresaltó, haciéndome soltar una exclamación ahogada y perder pie. La distracción me hizo no apoyar bien el pie en la corteza del árbol y resbalé. La gravedad hizo su trabajo haciéndome caer de espaldas, prácticamente encima de quien fuera que había dicho aquello en primer lugar.
-¡Aaah!

- Hey, no te caigas- le dije y me hehcé a reir, agarrandola para que no se diera un buen golpe contra el suelo. Una vez que estaba otra vez de pie, le sonreí y le dije- Encantado de verte otra vez- sonreí como siempre y pregunté- ¿ Que haces despierta tan temprano?- seguía sonriendo, luego puse cara de interesado en la respuesta- ¿ Dando una vuelta por los confines de nuestra prisión?- dije y sonreí- ...o distrito, como prefieras llamarle.

Afortunadamente, alguien me agarró antes de que me diera contra el suelo. Me puse de pie ya sobre el suelo, tambaleándome un poco hasta encontrarme estable, y entonces me dí cuenta de quien era quien me había parado.
-¡Iven! Que sorpresa... si, es muy temprano, pero mi padre me despertó.-Hice una mueca de disgusto. Con lo bien que estaba yo en la cama. Entonces escucho como se refiere a nuestro distrito como prisión, y miro a nuestro alrededor, algo seria. No es que no esté de acuerdo, pero no quiero que nadie nos escuche y nos metamos en problemas. Pero me relajé al comprobar que estábamos solos.-Supongo que sí. La verdad es que sólo paseaba. ¿Y tú? ¿No estarás intentando escaparte?-Bromeé, sonriendo.

Sonreí al ver que miraba al redor por si había gente. Luego lo hice yo y dije- Si pudiera lo haría- aseguré asintiendo con la cabeza y continué- Pero estoy seguro de que si lo intento acabaré de dos posibles formas: electrocutado o matado en la plaza- me heché otra vez a reir y luego pensé en que era realmente lo que estaba haciendo tan temprano caminando por ahí, pues ni yo lo sabía- Digamos que no tengo sueño.

Iven decía que si pudiera, se escaparía. A mi no me gustaba estar allí, por supuesto, pero nunca lo había pensado. ¿Qué iba a hacer si lo conseguía, fuera y sola?
-¡No digas eso!-Dije, horrorizada, cuando dijo que si lo intentaran podrían matarlo en la plaza.-Si te atraparan, ¿Crees que me quedaría mirando? No dejaría que te hicieran nada. De verdad.
Desvié la vista sintiéndome un poco estúpida. Nadie iba a escaparse y no iba a ser necesario hacer nada, tenía que dejar de decir estupideces.

- Tranquila que no pienso escaparme- le dije sonriendo y cogí un palo del suelo. Luego lo tiré contra la verja y está empezó a silvar más fuerte- No soy capaz de trepar tanto como para subirme a una rama y tirarme- Volví a sonreir y bajé la cabeza un poco al pensar en que dentro de poco tendríamos que empezar a pedir las teselas- ¿ Cuantas papeletas tendrás este año?- le pregunté.

-Quizá yo podría trepar... pero me mataría si tuviera que tirarme al suelo al otro lado desde tanta altura.-Dije, pensativa. Quizá si hubiera un árbol al otro lado al que pudiera saltar... no, tenía que dejar de pensar en esas cosas.
Para quitármelo de la cabeza, me concentré en la pregunta que él acababa de hacerme.
-Sólo seis, mi padre jamás me deja pedir teselas. Pero temo que sean más que suficientes... no se. A lo mejor tengo miedo.-Confieso, bajando la vista avergonzada.